Atacar y dañar al sector, especialmente guías, agencias, hoteles, servicios turísticos o lo que podríamos definir mejor «matar moscas a cañonazos», esto es lo que hace el Patronato de la Alhambra y el Generalife ante la denuncia de las Agencias y Guías de la reventa de entradas al Monumento.
En lugar de acabar con esas empresas fantasma, que se dedican a esa actividad revendedora, somete a una sangría diaria a las agencias de viajes locales, andaluzas y de todo tipo. Acaba paulatinamente con profesionales de muchos años, honestos, creadores de empleo y con CV envidiables. Agencias que fueron las denunciantes del caso.
El llamado índice de Gestión propuesto por la Alhambra desde 2016 ya supuso un paso atrás. Este índice, impuesto por una empresa contratada y erróneamente atribuido a la Universidad de Granada, ya se aplicaba de manera subliminal, contribuyendo al descrédito de las AAVV y evidenciando la nefasta gestión del Patronato.
Este índice no solo es dañino para las agencias de viajes, sino que no cumple tan siquiera con ninguno de los mínimos requisitos que obliga la ley en cuanto a transparencia, fundamentos, objetivos y valoración de los mismos.
No se puede basar la actividad de una agencia en unos índices irreales y sin sentido que penalizan las acciones normales de los movimientos turísticos.
El sector de las agencias desde el primer momento, y desde mayo de 2017, se ofreció a colaborar para la implantación de un sistema de reserva de entradas coherente y de acuerdo a las necesidades técnicas y lógicas del momento turístico que se atraviesa.
Hay que reconocer que se mantuvieron muchas reuniones pero posteriores al ya definido plan y nunca a lo mandado en su momento por la Consejera de Cultura en la reunión definitoria del plan de acción, siendo marginados desde ese mismo momento.
El cambio en la cabeza de la Consejería cambió las tornas a partir de septiembre de 2017, y el PAG, desligado de cualquier compromiso, volvió a imponer a todo el sector su visión errática.
De ninguna manera se ha valorado la experiencia de las AAVV, el número de empleados o la antigüedad colaborando con el Patronato, como debería ocurrir con cualquier índice valorable en la contratación con las administraciones, como pueden ser:
– Solvencia profesional
– Solvencia económica
Se habla con total impunidad de la transparencia, y se vuelve a faltar a la verdad, ya que las Asociaciones, Federación Plataforma y CEAV hemos solicitado formalmente varias veces al PAG, diálogo y creación de líneas de trabajo, a las que siempre han respondido cada vez con medidas más dañinas para los profesionales turísticos y culturales.
PEDIMOS Y ROGAMOS DIALOGO VERDADERO E INMEDIATO, EXIGIMOS MEDIDAS URGENTES, PRÁCTICAS Y EFICIENTES.
DEFENDEMOS LA ECONOMÍA DE LA REGIÓN y POR ENDE DEL PAÍS, EL EMPLEO, Y LA PROTECCIÓN DE NUESTRO BIEN MÁS PRECIADO: EL EXTRAORDINARIO PATRIMONIO HISTÓRICO DE LA ALHAMBRA Y EL GENERALIFE.
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